sábado, 17 de febrero de 2018

LAS CINCO LEYES DEL ORO

I. El oro se gasta fácilmente, en cantidades cada vez mayores, al hombre que reserva no menos de una décima parte de sus ganancias para crear un bien en anticipación de su futuro y el de su familia.

II. El oro trabaja con diligencia y de forma rentable  para el poseedor sabio que le encuentra un uso provechoso, multiplicándose incluso como los rebaños en los campos.

III. El oro permanece bajo la protección del poseedor prudente que lo invierte según el consejo de los sabios.

IV. El oro escapa al hombre que invierte sin parar en compañías que no le son familiares o que no están aprobadas por aquellos que saben cómo usar el oro.

V. Gold huye del hombre que lo obliga a ganancias imposibles, que siguen el consejo seductor de estafadores y estafadores o que confía en su propia inexperiencia y sus intenciones románticas de inversión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario